Para la fabricación del azúcar, la materia prima esencial es la caña de azúcar, la cual es trasladada desde el campo hasta la fábrica por camiones diseñados para tal propósito. Los camiones tras su paso por la ciudad suelen dejar restos de caña que se desprenden de forma accidental.
Con el tiempo se ha ido perfeccionando el proceso de corte y carga de la caña, así como también se han hecho mejoras en los métodos de sujeción aplicados a la carga de caña para impedir que se desprendan y caigan de los camiones en su traslado del campo al ingenio.
Aunado a los esfuerzos por parte de la empresa por mejorar la calidad de sus procesos de abastecimiento de caña, Ingenio "El Molino" paga una cuota al ayuntamiento para que éste envíe una cuadrilla de recolectores de basura para recoger y retirar la caña que los camiones abastecedores puedan dejar a su paso por las calles de la ciudad.
En los últimos años Ingenio "El Molino" preocupado por su ubicación dentro de la ciudad ha emprendido acciones que disminuyan las molestias que pueden ocasionar a la población circunvecina.
En la colindancia con la Av. Insurgentes que es una de las vías principales de la ciudad, las instalaciones de la fábrica están delimitadas por una malla ciclónica, lo cual tiene el incoveniente de permitir el paso de ruido, polvo y bagazo existente dentro de las instalaciones hacia la ciudad, por lo que se procuró el nacimiento y proliferación de una planta trepadora sobre la malla, la cual funciona como barrera ante el paso del ruido, el polvo y el bagazo. En las zonas en las que la planta aún no ha logrado crecer se instaló una cubierta plástica sobre la malla que tiene el mismo efecto bloqueador.
Otra innovación reciente hecha en pro de la sociedad es el crecimiento de altura de las chimeneas, labor que se está efectuando de forma gradual, lo cual ayudará a disipar mejor el vapor de agua emitido por las calderas de la fábrica.